¿Y si gana Alvarito?
Por Carlos de la Torre / Diario HOY
¿Qué sucederá si gana Noboa? ¿Cuáles serán los escenarios si le
resultan sus estrategias de repartir microcréditos, viviendas, sillas
de ruedas y computadoras? Una primera hipótesis es que a lo mejor no
cambia mucho más allá de que se dé la movilidad social de nuevas
élites ligadas al Prian que se repartirán las prebendas, los negocios
y el control del Estado. Otra hipótesis es que el triunfo de Noboa
podría significar la transformación de los regímenes de acumulación y
de dominación política. Parece que Noboa implementará políticas que
terminen con la mezcla de aperturismo y estatismo que han
caracterizado a la economía ecuatoriana. Noboa privatizará todo lo que
pueda y abrirá al país a la globalización. Las privatizaciones y el
aperturismo serán lideradas por un empresario cuyo partido controlará
el Congreso y los mecanismos de supervisión y fiscalización. Noboa
tendrá carta blanca para privatizar de la manera que crea más
conveniente. Si las élites tuvieron miedo de ser excluidas de las
privatizaciones de Bucaram, ahora deberían temblar, pues no hay
garantías de transparencia.
Noboa contará con una mayoría en el Congreso formada por su partido,
por Sociedad Patriótica, a lo mejor el PRE y legisladores que se
venderán al empresario. Con los dineros de su fortuna y de las
privatizaciones, no tendrá problemas para comprar legisladores y
asegurar mayorías. Se aplicarán políticas viejas como son el
prebendalismo, la corrupción y el clientelismo pero sin tapujos y con
descaro. Los otros partidos verán cómo se secan sus clientelas, pues
los caciques barriales y quienes mueven la política migrarán hacia los
partidos que tengan los recursos para repartir obras, trabajos y
favores. ¿Será que el Prian y el PSP remplazan a las maquinarias del
PSC y de la ID? Los cambios en la política económica y la corrupción
provocarán la reacción de varios grupos sociales. Los indígenas y
campesinos protestarán en contra del TLC y serán reprimidos al igual
que los sectores de izquierda de clase media que apoyaron a Correa,
pues Noboa ha indicado que la ley y el orden serán los ejes de su
Gobierno. Con la intención de asegurar el apoyo de los Gutiérrez,
Noboa ha indicado que enjuiciará a los "forajidos" y su Gobierno
probablemente se caracterice por el uso instrumental de la ley para
perseguir a todos los "forajidos" y "comunistas" que se le opongan. Si
es que gana Noboa parece que viviremos en un régimen en el cual
quienes no estén de acuerdo con su proyecto de transformar al país en
una banana republic o en una zona franca serán silenciados ya sea a
base de dólares o de palazos. Sin la presencia de sectores de centro y
de izquierda en el nuevo Congreso que además está lleno de ex
militares y de personajes ajenos a la política será muy difícil, si es
que no imposible, fiscalizar a un señor que está convencido de que
además de ser el dueño de empresas, de su partido y de su fundación,
es el propietario del país. A lo mejor Noboa logra gobernar con la
hegemonía de su partido y con la compra de aliados sustentados en un
nuevo modelo económico que dará más bienes de consumo a las clases
medias y en el que se hará caridad estatal a los pobres a cambio de su
lealtad incondicional al buen patrón-presidente.
¿Qué sucederá si gana Noboa? ¿Cuáles serán los escenarios si le
resultan sus estrategias de repartir microcréditos, viviendas, sillas
de ruedas y computadoras? Una primera hipótesis es que a lo mejor no
cambia mucho más allá de que se dé la movilidad social de nuevas
élites ligadas al Prian que se repartirán las prebendas, los negocios
y el control del Estado. Otra hipótesis es que el triunfo de Noboa
podría significar la transformación de los regímenes de acumulación y
de dominación política. Parece que Noboa implementará políticas que
terminen con la mezcla de aperturismo y estatismo que han
caracterizado a la economía ecuatoriana. Noboa privatizará todo lo que
pueda y abrirá al país a la globalización. Las privatizaciones y el
aperturismo serán lideradas por un empresario cuyo partido controlará
el Congreso y los mecanismos de supervisión y fiscalización. Noboa
tendrá carta blanca para privatizar de la manera que crea más
conveniente. Si las élites tuvieron miedo de ser excluidas de las
privatizaciones de Bucaram, ahora deberían temblar, pues no hay
garantías de transparencia.
Noboa contará con una mayoría en el Congreso formada por su partido,
por Sociedad Patriótica, a lo mejor el PRE y legisladores que se
venderán al empresario. Con los dineros de su fortuna y de las
privatizaciones, no tendrá problemas para comprar legisladores y
asegurar mayorías. Se aplicarán políticas viejas como son el
prebendalismo, la corrupción y el clientelismo pero sin tapujos y con
descaro. Los otros partidos verán cómo se secan sus clientelas, pues
los caciques barriales y quienes mueven la política migrarán hacia los
partidos que tengan los recursos para repartir obras, trabajos y
favores. ¿Será que el Prian y el PSP remplazan a las maquinarias del
PSC y de la ID? Los cambios en la política económica y la corrupción
provocarán la reacción de varios grupos sociales. Los indígenas y
campesinos protestarán en contra del TLC y serán reprimidos al igual
que los sectores de izquierda de clase media que apoyaron a Correa,
pues Noboa ha indicado que la ley y el orden serán los ejes de su
Gobierno. Con la intención de asegurar el apoyo de los Gutiérrez,
Noboa ha indicado que enjuiciará a los "forajidos" y su Gobierno
probablemente se caracterice por el uso instrumental de la ley para
perseguir a todos los "forajidos" y "comunistas" que se le opongan. Si
es que gana Noboa parece que viviremos en un régimen en el cual
quienes no estén de acuerdo con su proyecto de transformar al país en
una banana republic o en una zona franca serán silenciados ya sea a
base de dólares o de palazos. Sin la presencia de sectores de centro y
de izquierda en el nuevo Congreso que además está lleno de ex
militares y de personajes ajenos a la política será muy difícil, si es
que no imposible, fiscalizar a un señor que está convencido de que
además de ser el dueño de empresas, de su partido y de su fundación,
es el propietario del país. A lo mejor Noboa logra gobernar con la
hegemonía de su partido y con la compra de aliados sustentados en un
nuevo modelo económico que dará más bienes de consumo a las clases
medias y en el que se hará caridad estatal a los pobres a cambio de su
lealtad incondicional al buen patrón-presidente.
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